jueves, 24 de octubre de 2013

"El capitalismo reduce la pobreza en el mundo"


Xavier Sala i Martín

El Capitalismo Reduce la Pobreza en el Mundo
Si convirtiéramos la riqueza de todos los superricos de la historia a precios actuales e hiciéramos el ránking de las personas más adineradas de todos los tiempos, veríamos que el primero de la lista es el emperador Mansa Musa I de Mali que vivió entre 1280 y 1337. Su imperio extraía ingentes cantidades de oro que él utilizó para crear ciudades, universidades, palacios, madrasas y mezquitas y promover la cultura, la ciencia y el arte. Musa convirtió la ciudad más importante de su imperio, Tombuctú, en una de las capitales mundiales del comercio, la cultura y la intelectualidad, con palacios y edificios diseñados por los mejores arquitectos españoles de la época.
Se cuenta que en 1324, Mansa Musa organizó un peregrinaje a la Meca acompañado de 60.000 hombres y 12.000 esclavos, todos vestidos en seda persa, cada uno cargado con una barra de oro de dos quilos de peso. Les acompañaban 80 camellos cargados con 120 quilos de polvo de oro cada uno. Dado que ese era un peregrinaje piadoso, Musa iba regalando el oro a los pobres que encontraba en el camino. El viaje acabó descrito en los libros como uno de los más fastuosos y extravagantes de la historia. El historiador al Humari visitó El Cairo 12 años después de que Mansa Musa pasara por ahí, y vio que la gente todavía hablaba, con cariño y nostalgia, de la generosidad del emperador de Mali. Algunos estudiosos(*) han cifrado la fortuna personal de Mansa Musa en 400.000 millones de dólares a precios actuales, tres veces superior a la de Bill Gates en el mejor momento de su vida (en su momento de máxima riqueza se estima que el fundador de Microsoft tuvo 136.000 millones de dólares en el banco).
A pesar de su inmensa y obscena riqueza, Mansa Musa nunca comió pizza o chocolate, nunca fue al cine, nunca pudo tomar una aspirina cuando tenía dolor de cabeza. Nunca pudo encender la tele con un mando a distancia cuando llegaba cansado a su palacio, ni pudo tirar de la cadena para que el agua se llevara sus deposiciones, ni apretar el interruptor para encender o apagar la luz. En su famoso viaje, tardó varios meses en recorrer a caballo los 5.000 quilómetros que separan Mali de la Meca, un viaje que un avión moderno realiza en unas 6 horas y 34 minutos. Los palacios de Mansa Musa no tenían aire acondicionado. Por más que en la época, Timbuctú era un centro intelectual, sus sabios no tenían acceso a los libros o a los artículos científicos que se desarrollaban en otras universidades del mundo. No tenían acceso a Google ni a los periódicos de todo el mundo de manera instantánea y gratuita. Sus hijos no podían jugar con la Playstation o la Wii, ni matar cerdos lanzando pájaros enfadados desde su ipad. Para comunicarse con su colega el sultan an-Nasir de El Cairo, Mansa Musa no tenía Whatsapp, ni Facebook, ni teléfono móvil. Tenía que escribir una carta que era transportada a caballo a través del desierto y que, si los piratas del desierto no la interceptaban, tardaba meses en llegar. Aunque parezca mentira, todo esto que el hombre más rico de la historia nunca pudo hacer, lo tiene el trabajador medio de una economía capitalista.
A través de la historia las sociedades humanas han sido formadas por unos pocos ciudadanos muy ricos y una aplastante mayoría de pobres. El 99,9% de los ciudadanos de todas las sociedades de la historia, desde los cazadores y recolectores de la edad de piedra, hasta los campesinos fenicios, griegos, etruscos, , romanos, godos u otomanos de la antigüedad, pasando por los agricultores de la Europa o medieval, la américa de los Incas, los Aztecas o los Mayas, la Asia de las dinastías imperiales o la África precolonial, vivieron en situación de pobreza extrema. Todas, absolutamente todas esas sociedades tenían a la mayoría de la población al límite de la subsistencia hasta el punto que, cuando el clima no acompañaba, una parte importante de ellos moría de inanición. Todo esto empezó a cambiar en 1760 cuando un nuevo sistema económico nacido en Inglaterra y Holanda, el capitalismo, provocó una revolución económica que cambió las cosas para siempre: en poco más de 200 años, el capitalismo ha hecho que el trabajador medio de una economía de mercado media no solo haya dejado de vivir en la frontera de la subsistencia, sino que incluso tenga acceso a placeres que el hombre más rico de la historia, el emperador Mansa Musa I, no podía ni imaginar.
¡Si! Ya sé que algunos me dirán que los trabajadores de hoy pueden disfrutar de todas estas comodidades gracias al progreso tecnológico y no gracias a la economía de mercado. La pregunta, sin embargo, es: ¿por qué se inventaron la aspirina, el aire acondicionado, el Whatsapp, los “Angry Birds” o el teléfono móvil? ¿Y por qué se inventaron en economías capitalistas? La respuesta es que los inventores buscaban beneficiarse económicamente de sus innovaciones, y el sistema capitalista les proporcionaba los incentivos correctos para que eso ocurriera.
En 1970, el 30% de la población mundial vivía con menos de un dólar al día.  En el año 2011 (último año para el que disponemos de datos), la tasa de pobreza era de menos del 5%. Es decir, la tasa de pobreza se ha dividido por 6 desde 1970. ¿Qué ha pasado desde 1970? Pues, entre otras cosas, que los países más poblados y más pobres del mundo abandonaron los sistemas socialistas de planificación que los condenaban a la pobreza y adoptaron el capitalismo como forma de organización económica. El caso más espectacular es el del país más poblado de todos: la China. Cuando Mao Tse Tung murió en setiembre de 1976, el 66% de los 1.200 millones de chinos vivían con menos de un dólar al día (un dólar al día es la definición de pobreza extrema que la Organización de las Naciones Unidas utilizó para declarar los objetivos del milenio en el año 2000). Un par de años después, su sucesor Den Xiao Ping introdujo el capitalismo como sistema económico en lo que hasta aquel momento había sido un país socialista-maoísta. Después de cuatro décadas de economía de mercado, el porcentaje de chinos que vive por debajo del umbral de la pobreza es de menos del 0,3%: Cuando murió Mao, había 615 millones de ciudadanos pobres en su país. De ellos, un total de 612 millones de personas han dejado de ser pobres gracias a que el sistema económico ha cambiado.


Una cosa parecida ocurrió en la India, que en 1991 abandonó su sistema socialista de planificación quinquenal e introduzco una tímida liberalización de mercado. Eso conllevó el crecimiento económico del gigante del sudeste asiático y ha conllevado que millones de ciudadanos dejaran de vivir por debajo del umbral de la pobreza. Y desde 1995, incluso la mayoría de países africanos empezaron a seguir la senda de crecimiento y a reducir sus tasas de pobreza.
¡No! El capitalismo no es un sistema económico perfecto. Pero cuando se trata de reducir la pobreza en el mundo, es el mejor sistema económico que jamás ha visto el hombre.

viernes, 11 de octubre de 2013

RICHMOND

                                                                        

                        BIOGRAFÍA DE MARY RICHMOND

                       
     Nació el 5 de Agosto de 1861 en Belleville, Illinois. Cuando solamente contaba con tres años de edad su madre murió y la enviaron a vivir con su abuela y sus dos tias. En 1978 se graduó en la High school del este de Baltimore. Mary Richmondse ocupó de una de sus tías hasta la muerte de esta. En 1888 comenzó a trabajar para la sociedad de la organización de la caridad de Baltimore. Abogó por el establecimiento de escuelas profesionales para el estudio del trabajo de casos. María Ellen Richmond fue una de las mujeres que influenciaron la dirección de la profesión del trabajo social en sus comienzos. Comienza a ser relevante para el Trabajo Social en 1889, cuando toma contacto con las sociedades organizadas de la caridad. Realiza un diagnóstico en función de los datos obtenidos de su experiencia de T.S. Su diagnóstico Social, explica el método del proceso que se debe seguir para hacer un buen diagnóstico de los problemas sociales de los clientes. Mary Richmond fue la inventora conceptual, la que teorizó y sistematizó el Trabajo Social, la que formalizó sus técnicas y contenidos, la que se montó el invento. Todo ello antes de que las mujeres americanas tuviesen derecho a voto. En 1917, a los 56 años, se adelanto de nuevo y publicó el primer texto de Técnicas y Métodos de Trabajo Social, denominado El Diagnóstico social. En 1922 , seis años antes de morir, publicó ¿Qué es el Trabajo Social de Casos? . Murió a los67 años de edad. 

- mary Richmond (1861-1928), norteamericana, publicó su libro más famoso Caso Social Individual en 1922 tras 40 años de experiencia de trabajo social y tras la década progresista y más creativa de 1910 a l920. Mary Richmond no sólo practicó el trabajo social, sino que le dio suprimer contenido técnico e ideológico. Fue la inventora conceptual, la que teorizó y sistematizó el Trabajo Social, la que formalizó sus técnicasy contenidos. Es una mujer al tanto de la teoría científica en las Ciencias Sociales de su tiempo.

- Richmond era evolucionista. El trabajo social para ella era conseguir la adaptación de los clientes a un mundo y a una sociedad que se iría reformando progresivamente. Por otra parte en el libro de Richmond apenas aparecen los negros ni los hispanos. La droga de la época es el alcohol, y el gran problema, el hambre y las enfermedades.

- En el Trabajo Social de Casos, Uno de los métodos más característicos es su aproximación multilateral, su capacidad de organizar procesos, de reunir de relacionar, establecer lazos y readaptar.

Todo trabajador de casos tiene que tener algún tipo de filosofía. las en este libro sugeridas son la siguientes:


1) Los seres humanos son interdependientes.

2) Los seres humanos son diferentes.

3) No son animales dependientes y domésticos.